Me levanto y ya están mis padres metiendo presión de que nos vamos a ver a JJ, mi amigo cura que vive en el pueblo más perdido del mundo mundial. Entre prisa y prisa todos al coche, dejamos a mi tía en el metro y al ratito de camino ¡ANDA, LA COMIDA! a volver otra vez. Por fin llegamos a la casa, un frío que te cagas y a comer. Entre una cosa y otra hago algún problemilla de genética, hago el tonto con Cara y acabamos con las existencias de chocolate de JJ. Más tarde nos vamos a ver Carmona que está a oscuras y es un rollo, la guiri con cara de peo. Por fin nos montamos en el coche para volver, entre caminos de ida y de vuelta me había leído un libro de cabo a rabo. Cuando por fin llegamos a casa la guiri se acuesta porque está muerta y nosotros cenamos croquetas en paz.
Y ya por la noche rutina (dormir)
No hay comentarios:
Publicar un comentario